19.11.14

Habrá que ser felices otra vez

Hace rato me puse a pensar, ¿viste esas cosas de la vida que te dan vueltas en la cabeza y siempre están ahí?
Después de que se fuera mi abuelo me di cuenta de lo que es ya no tener a alguien. Que no existan formas físicas ni distancias posibles para llegar a esa persona. Fue la primera vez que sentí que no había forma de reparar eso, fue mi primer gran pérdida.
Inevitablemente eso te deja pensando, primero los abuelos, y el orden lógico te dice que siguen los padres. Incluso me cuesta escribirlo, y por mas que me oponga y no quiera creerlo, es así..
Hace 7 años mas o menos me fui de mi casa, a estudiar, primero La Plata, después Buenos Aires. Al principio todo es hermoso, pero año a año me iba costando mas irme de casa. Uno no quiere creer que la vida no es tan simple, que no es justa. A fuerza de tropezones y caídas te haces al molde.
Tantas cosas vistas y personas conocidas me dejan una reflexión, la vida no es complicada, nosotros la hacemos complicada, no es injusta, los hombres lo son. Y en un mundo así parece que no tiene cabida decir las cosas como las pensás, ser franco, sincero, auténtico. Si alguien no te cae bien no simulas que te cae bien, simplemente tomás distancia. O los que manejan a la gente con la lástima y culpa. Si cada uno fuese auténtico y fiel a lo que piensa las cosas serían mucho mas simples.
Al final de cuentas quien dijo que vinimos al mundo para buscar la felicidad. Nos hicieron creer que la plata era la felicidad, que ser exitoso lo era, y entre tanto quilombo nos abocamos tanto a eso que nos olvidamos de ser felices.
Entonces, con estos planteos que parecen inconexos pero que internamente tiene mucho que ver, decidí plantearme las cosas de otra manera. Voy a hacer todo lo posible por disfrutar de mi gente, tanto que el día que se vayan o me vaya digan "disfrutó hasta el último momento", quiero ser fiel a lo que me diga el corazón.
Hoy estoy feliz porque tengo un ahijado hermoso y porque mi familia está bien y los amo. Hoy mi prioridad soy yo y lo que siento.

No hay comentarios: